El pasado 17 de Octubre, gracias a las indicaciones de nuestro amigo Oscar, fuimos a conocer la Vía Ferrata de Dos Aguas. El enclave por el que discurre es fabuloso y la vía es bastante aerea y tiene un puente tibetano de unos 20 metros de largo en el que "te da la risa" cuando vas por la mitad y empieza a moverse sin parar. El equipamiento deja bastante que desear, tanto por el material utilizado como por la calidad del montaje, lo que no la hace muy aconsejable debido al riesgo inherente que esto supone.
Para volver al punto de partida dos rappeles, de unos 35 m cada uno, completan esta actividad.
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